PESCADO Y MARISCO. CLÁSICOS DE LAS FIESTAS.
La cola de rape y la dorada son clásicos de las Fiestas. En ambos casos, pescados blancos de sabor suave, idóneo para toda la familia. El rape nos aporta una gran versatilidad en la cocina. Podemos hacer desde un suquet a una zarzuela. La dorada, al horno, os quedará perfecta y sacaréis todo el sabor. Y, si la hacéis ''a la sal'', os resultará especialmente jugosa.
Por su parte, el marisco aporta el toque más festivo a las mesas y tenéis mucho donde escoger: gambas, langostinos, cigalas, almejas, mejillones... Y, por supuesto, el bogavante y las ostras, ¡apuestas seguras! Un consejo: si tenéis que cocer el bogavante en casa, hacedlo con agua de mar y sal, y sólo 10 minutos sin que llegue a hervir. Después dejadlo enfriar sumergiéndolo en agua de mar fría y hielo.
FRUTA Y HORTALIZA. COLOR EN LAS MESAS NAVIDEÑAS.
Ya sean de temporada y de proximidad, o exóticas, frutas y hortalizas son protagonistas en las mesas festivas aportando color, sabor y tradición. También podéis dar un punto gourmet con las hortalizas mini: zanahorias de colores, berenjenas, calabacines, pepinos mini, tomates cherry o puerros. Su medida es mini, pero su sabor es grande! El Consejo: Si no encuentras estos productos en tu parada habitual, haz el encargo a tu frutero de confianza!
El sabor tradicional nos lo aportan las hortalizas para el caldo: col, zanahoria, chirivía, apio, puerro y nabo. Y también, las buenas ensaladas de Navidad con escarola, rábanos, endibias, cebolleta, etc. Y que decir de las frutas? A manzanas, peras y buenísimos cítricos de temporada, se suma la casi tradicional piña, vistosa y digestiva, la uva de Fin de año, las tentadoras cerezas y los siempre festivos frutos rojos (arándanos, frambuesas, moras).
CARNE Y AVE. SELECTA TRADICIÓN.
El cabrito, la pularda y el capón forman parte de la tradición gastronómica de la Navidad en Catalunya. Sin duda, una gran ocasión para disfrutar de la carne, fina y tierna, del cabrito, ya sea la paletilla al horno o unas costillitas rebozadas. Si hablamos de aves, pulardas y capones son tradicionales en casa. La pularda tiene un sabor delicado y fino. La podéis cocinar rellena, asada o ''a la sal''. El capón (¡puede llegar a pesar 3 kg.!) es tierno y suave. Se prepara habitualmente asado. Consejo: probad también la pintada.
Otro plato de carne especialmente interesante de reciente introducción en nuestra cocina es el rosbif de ternera o de buey. Son muchos los amantes de esta receta que se hace con parte del lomo o del solomillo. La pieza se asa entera al horno de forma que el interior de la carne quede bien rosado.